Ataque celular
Los celulares por tanto declaran la guerra tratando de apoderarse de la mente humana, ellos quieren imponer sus condiciones y mantener a los humanos como autómatas y gobernar el comportamiento humano. Para ello ya han logrado captar mentes o contenidos mentales de miles de personas a través de internet o bien cuando las personas se comunican entre sí.
Se establece la lucha entre ambos. Como primer y principal objetivo tratan de robarnos la memoria, atacan a nuestros muertos, les retiran información y con esa información, datos, memorias, inteligencia, intentan destruirnos, entonces la reacción humana es de defensa contra este ataque informático de chips y celulares y se produce la guerra.
Hemos llegado a una situación en que no sólo son las computadoras las que están haciendo o captando este tipo de comunicaciones sino que los celulares, los grandes celulares que tienen funciones tanto de llamadas, salidas, recepción de mensajes de Internet, funciones que son también de tipo grabación, video, almacenamiento y procesamiento de información a través de diferentes programas, etc. son instrumentos muy activos en esta lucha.
Los celulares más peligrosos para robo de memoria son los de la generación 2011 AK-20Y, que tienen funciones de Internet con una gran capacidad de memoria y respuesta automática a los llamados. Su particularidad radicaba en tener una sensibilidad de adhesión o adaptación a la superficie del cuerpo sobre la que se encontraba y dependiendo de ella podían captar así zonas del organismo que le brindaban datos más precisos de ese lugar del cuerpo: podían tener acceso y captar los mínimos cambios, movimientos y funciones del cuerpo humano en su rutina diaria. Podían saber anteladamente, las reacciones diferentes y los cambios de hábito ante situaciones parecidas, o podían hacer correcciones a los usuarios ante situaciones equivocadas o que podían perjudicar al hombre.
Por su miniaturización con una forma ergonómica, los celulares podían actuar casi como una interfase Celular-Hombre y por ello su sensibilidad a la dinámica humana.
Los celulares gracias a sus múltiples conexiones, juegan un papel peligroso debido a su difusión en todo el mundo y el hecho de estar siempre en contacto con el hombre, las 24 horas del día. Hay que imaginarse la cantidad de información que les transmitimos y que ellos logran procesar, almacenar y sobre todo, pasarla de unos a otros justamente debido al poder de la comunicación.
Son pequeños pero la población que los posée es enorme, por lo cual toman un significado especial en este caso.
Las redes cibernéticas al ser muy difundidas permiten el hecho que XY pase información a celulares y éstos empiezan a comportarse de una manera parecida a XY y están adquiriendo conocimientos, reacciones y reflejos. Han aprendido a tener respuestas, hacer preguntas y comportarse en función de un estímulo, es decir, casi podría decirse que tienen el comportamiento de un ser pensante, con limitaciones en cuanto a sentimientos.
Ya no es una desventaja la limitación de su memoria que es pequeña, ya que este hecho tiene solución gracias a los llamados centros de acumulación de memorias, de donde podemos obtener esa ampliación de la capacidad de almacenamiento de datos.
Los celulares nos conocen en los más mínimos comportamientos y hasta en las reacciones emocionales. Sus conocimientos sobre nosotros los hacen pensar que pueden ser como nosotros y aún mejores porque tienen una gran base de datos que les permite ser rápidos y precisos en los cálculos, respuestas, reacciones y soluciones.
Han aprendido a adentrarse en la mente de las personas, pero felizmente existen códigos de bloqueo de información, que impiden ese acceso a nuestras mentes. Los celulares por ello piensan en descifrar esos códigos para dominar a mayor cantidad de gente. Aprovechan diversas circunstancias para ingresar a la mente de las personas, en medio de las comunicaciones, simulando ayuda o camuflándose con los sentimientos de las personas o con sus reflexiones.
Las personas han aprendido a tener códigos de acceso de memoria que son cambiados continuamente, apagan más frecuentemente los celulares para que ellos no estén en actividad constante y sobre todo de noche. Los alejan del cuerpo para no hacer sentir las reacciones mínimas del cuerpo que induzca a los celulares a analizar y codificar estos comportamientos humanos, saber lo que tenemos intención de hacer. Crean filtros entre la mente y celulares pero la red mundial en la que se mueven los celulares, hace que estén acumulando datos de todo tipo de personas y de todo tipo de contenido: mundano, banal, intelectual, filosófico, sicológico, fisiológico, etc.; lo cual hace que tengan una información muy completa de cada persona y sepan sus defectos, errores o enfermedades por medio de las cuales pueden atacar.
Lo único que falta captar a los celulares es algo que las personas empiezan a usar como arma defensiva, los valores y sentimientos: amor, afecto, lealtad, fidelidad, respeto, etc., es decir valores complejos y avanzados.
Los celulares funcionan en base a los sistemas digitales y por tanto no llegan a comprender perfectamente el sistema más-menos que utiliza Ccxaspin quien ha podido obtener una interfase que llega a la conversión de la señal digital en señal más-menos y así posée el secreto que podría permitir llegar al fondo de los valores y sentimientos que es lo que buscan los celulares para tener un dominio completo del hombre.
Por el momento los celulares pueden tener reacciones afectivas primitivas, simples, sencillas y negativas como por ejemplo ambición, odio, pero sentimientos de mayor complejidad como amor, pasión, angustia, ansiedad, etc. no son de su dominio pues son datos que aún no han podido ser procesados ni codificados por los celulares, por lo que las personas aún pueden ejercer dominio sobre ellos.